LEER: Desde los que hacemos posible Todos los Nombres de Porcuna, quisiéramos pedir disculpas a todas aquellas personas que se han puesto en contacto con nosotros a través de e-mail o facebook solicitando información sobre sus familiares, y que a día de hoy no les hemos contestado. Creo que son unas 25 peticiones las que tenemos sin atender, pero es que los medios de los que disponemos son escasos y el trabajo se nos acumula.

Gracias por vuestra paciencia, y esperemos contestar a vuestras peticiones lo antes posible.


- El monumento a la intolerancia y al fascismo se renueva en Porcuna (Jaén)
- El monumento a los "Caídos" sufre una gamberrada.
- Por la retirada de nombres y símbolos franquistas de Porcuna.
- Calles relacionadas con el franquismo y su exaltación en Porcuna
- La peculiar memoria histórica en Porcuna.

domingo, 12 de agosto de 2012

Mohamed Ben Amar, el moro olvidado, la toma de Porcuna y otras represiones. I Parte.

Regulares avanzando entre olivos
Tropas indígenas marroquíes avanzando entre olivos

En las crónicas guerreras y partes de la contienda incivil relacionadas con la llamada “Campaña de la Aceituna”, y en consecuencia, con la batalla de Lopera-Porcuna a finales de diciembre de 1936, son pocas, por no decir ninguna, las referencias a los marroquíes que participaron en ella dentro del autoproclamado “ejército nacional”. Los honores y los laureles militares, como no podría ser de otra manera, estuvieron reservados a los “nacionales”, a aquella sangre española que recordaba, en palabras del jesuita Bernabé Copado, a los tercios de Flandes o de Bailén. Sin menospreciar, sin duda, la heroicidad de los requetés, el señorío y tronío de la policía montada y otras fuerzas que acompañaban al Teniente Coronel Redondo cuando entró en Porcuna en la tarde-noche del 1º de enero de 1937, parece ser, -  aunque los cronistas de guerra franquistas lo pasen por alto  -, que fue un Tabor de Regulares de Larache (fusiles y ametralladoras suponemos) los que avanzaron en vanguardia aquella tarde, una vez la aviación “alemana”  había despejado el camino. Entraron empuñando pistola y con bombas de mano, casa por casa, rincón a rincón, sótano a sótano, doblegando la resistencia republicana que no había logrado escapar del cerco de las columnas de Redondo y Gómez Cobián. Aunque Martínez Bande (1957;131) dice que en la acción tomó parte un Tercio de Requetés (suponemos que el Virgen del Rocío de Huelva), curioso es que solo tuviese un herido, el boina roja Diego Torres Contreras, citado en la obra de Bernabé Copado. Las fuentes militares franquistas, como Copado, Martínez o el propio Redondo, y demás crónicas de época, no pierden la oportunidad en ensalzar a sus valerosos guerreros, y de paso, para confirmar la ferocidad de los combates, enumeran con nombres y apellidos sus bajas (muertos y heridos), así como las medallas conseguidas. Así ocurre en la desastrosa refriega con la XIV Brigada Internacional en Montoro y Villa del Río, o la defensa “numantina” de Lopera ante la valiente ofensiva brigadista, cañoneada desde Porcuna, y menospreciada por el fascio. En el caso de la toma de Porcuna, el “nido de las águilas”, según la jerga militar de la época, las fuentes son parciales, sesgadas y torticeras. Los laudatorios del régimen describen con detalle las misas de campaña, el ropaje de la soldadesca, los desgarros en la misma, las barbaries rojas y las loas a Cristo Rey. Todas coinciden en las dificultades orográficas y militares que supuso la conquista de Porcuna, todas hablan del gran número de prisioneros tomados al enemigo, a la huída de éste, al material de guerra recuperado, a las casas incendiadas, a la magnífica labor (clave de la victoria, sin duda) de los aviones alemanes; pero, ninguna, y decimos bien, ninguna habla de cómo se tomó verdaderamente Porcuna. Es decir, ¿quién fue la vanguardia que entró en Porcuna a eso de las 17-18 horas del día 1º de enero de 1937?. ¿Quiénes combatieron calle a calle, casa por casa, los últimos reductos republicanos desconcertados por los bombardeos de la aviación?. Lo tenemos claro: fueron, sin duda, los olvidados, los otros olvidados, los marroquíes, el Tabor de Regulares de Larache, quienes al asalto, cubiertos desde lejos, quizás, por los boinas rojas y demás tropas auxiliares de Redondo, entraron en Porcuna sin miramientos, a bayoneta calada y con bombas de mano. Eran la vanguardia, la élite del ejército colonial español, las tropas africanas adiestradas en la muerte y la barbarie por una oficialidad colonialista que no tuvo miramientos con la vida ajena. Estos marroquíes se convirtieron en rudos soldados desde la más temprana infancia, desarraigados de sus hogares, fueron convertidos en niños soldados, y adiestrados en el terror,  la muerte y el caos.

Tropas indígenas marroquíes cerca de Ronda
Tropas marroquíes en combate (Ronda, Málaga)

Según Martínez Bande (1957; 131), retomando Porcuna,  en el interior del pueblo se recogieron 100 muertos (el mismo número cita Moreno Gómez, sin fuente alguna, aunque creemos que bebe de Copado y Martínez Bande), a los que habría que unir en días sucesivos a los encontrados en el campo, sobre todo de “franceses, rusos y checoslovacos” (sic), según el Diario de Córdoba de 2.01.1937. Son los famosos 200 muertos de los que hablan los partes de guerra alrededor del Cerro San Cristóbal (Lopera), que se contabilizan hasta la extenuación y que llegan a sumar el millar, según el diario cordobés falangista “Azul” de fecha de 4.01.1937. Tampoco distinguen si los muertos son civiles o militares, aunque los primeros fueron muchísimos, según hemos podido comprobar en el registro civil. En los días sucesivos sabemos, por la propia crónica radiada y escrita de Queipo de Llano, que la “limpieza” del pueblo seguía, y que muchos “rojos” estaban escondidos en las casas, entre otros el Jefe de la Artillería roja, que estaba herido. En el Diario de Córdoba del 3.01.1937 se puede leer: “el número de muertos es considerable, en una sola calle fueron encontrados doce milicianos rojos muertos” (¿fusilados tal vez?); y por los cálculos aproximados del padre Bernabé Copado, capellán de Redondo, fueron hechos prisioneros “unos treinta, entre soldados de artillería y sanitarios”. ¿Qué fue de ellos?: se desconoce, pero no estaría de más echarle un vistazo al listado que nos proporciona Hidalgo Luque, sobre los fusilamientos en Córdoba en los días posteriores a la batalla. Las razzias se sucedieron en el pueblo, y las detenciones también. Varios camiones salieron en días sucesivos cargados de prisioneros hacia Córdoba. ¡Nunca volverían!.

Entrada de las tropas marroquíes por el "muro" (Porcuna) el 1 de enero de 1937.
Entrada de los Regulares de Larache en Porcuna a la altura de "El Muro". 1º de enero de 1937.

El Teniente Coronel Redondo, que llenó su pechera con varias “ensaladeras”, apenas le da importancia a la toma de Porcuna. En su libro “El Requeté”, prefiere tomar las citas del capellán de la columna, en vez de contar de primera mano sus experiencias. Algo parecido le ocurre a un combatiente del Tercio Virgen de los Reyes. Dicho Tercio, según él, participó activamente en la toma de Porcuna, aunque en su obra “Historia del Tercio de Requetés Virgen de los Reyes, de Sevilla”, la misma se despacha así: “El día 31, Redondo con el Requeté prosigue la maniobra frente a una fuerte resistencia. Al día siguiente, primero del año 1937, se asalta Porcuna por un Tabor de Regulares y el Tercio Virgen de los Reyes” (sic). ¿Quién asaltó Porcuna, el Tercio Virgen del Rocío, de Huelva; o el Tercio Virgen de los Reyes, de Sevilla?. Parece que los protagonistas no se ponen de acuerdo; y quizás sea, porque ninguno lo asaltó, salvo el Tabor de Regulares de Larache, la verdadera vanguardia de Redondo y cía, los verdaderos “héroes”, los olvidados, sin duda, en toda esta macabra historia teñida de sangre.

CONTINUARÁ ... 

Bibliografía y Fuentes:

- COPADO, BERNABÉ (1937): Con la columna Redondo. Combates y conquistas. Crónica de guerra.
- SÁNCHEZ TOSTADO, LUIS MIGUEL (2006): La Guerra Civil en Jaén. Historia de un horror inolvidable. Colección Memoria Histórica.
- SANTIAGO MORENO, ANTONIA (2008): Testigos directos de la Guerra Civil en Porcuna.
- MARTÍNEZ BANDE, JOSÉ MANUEL(1969): La campaña de Andalucía. Servicio Histórico Militar. Monografías de la Guerra de España, nº 3.
- REDONDO, LUIS y ZAVALA, JUAN (1957): El Requeté (la tradición no muere). Historia de la Cruzada, Tomo 3.
- PANTOJA VALLEJO, ANTONIO y JOSÉ LUIS (2006): La XIV Brigada Internacional en Andalucía. La tragedia de Villa del Rio y la Batalla de Lopera. Diputación de Jaén.
- HERRERA SÁNCHEZ, JOSÉ (1999): Historia del Tercio de Requetés Virgen de los Reyes, de Sevilla. Madrid.
- MORENO GÓMEZ, FRANCISCO (2008): 1936: el genocidio franquista en Córdoba. Crítica.
- Noticias relacionadas: “Las otras víctimas del olvido: los “moros” de Franco”.
- U.H.P. 11.02.1937.
- Partida de defunción de Mohamed Ben Amar. Registro Civil de Porcuna (Jaén), 2012.

No hay comentarios: