Una de las consecuencias directas de la guerra y la represión franquista fue el empobrecimiento de muchas familias al encontrarse el padre muerto o detenido, privando así a la familia del jornal (estacional). En Porcuna sabemos que 252 niños menores de 14 años necesitaron la ayuda del entonces "Auxilio Social", aunque no todos se beneficiaron de los comedores. Otros, sin más, fueron enviados directamente a los hospicios de Jaén.
También sabemos, y la cifra es alarmante, que 1.309 cabezas de familia solicitaron las cartillas de beneficiencia en 1941. La media de hijos por familia era de cuatro, por lo que podríamos estar hablando (incluyendo a la madre) de cerca de 8.000 personas que en posguerra eran literalmente pobres, sin más recursos que sus brazos cuando éstos eran aún jóvenes. Esto quiere decir que más de la mitad de la población de entonces (unos 13.000 habitantes) carecían de los medios necesarios de subsistencia, lo que explica los numerosos hurtos famélicos que se producen en posguerra, las numerosas condenas por los tribunales militares, así como, la elevadísima mortandad infantil.
Esta es la consecuencia del golpe militar y del franquismo. Que nadie lo olvide, que nadie considere que la dictadura fue una buena etapa en la Historia de España. Un tercio del país fue fusilado o encarcelado, y otro sufrió el hambre, la violencia y las carestías (niños y mujeres incluidas).
Fuente: Archivo Histórico Muncipal de Porcuna (Jaén).
Foto: Romería de Alharilla en la posguerra.
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