Camino de los campos de concentración franceses, de R. Capa |
¿Casualidad o exterminio?. El 13 de septiembre de 1940, durante la visita de Serrano Suñer a Berlín como
Ministro de Gobernación de España y Presidente de
la Junta Directiva de la Falange se publicó la orden de
deportación de los republicanos españoles a campos
de concentración, como "apátridas", dejando de ser prisioneros de guerra, para convertirse en víctimas del holocausto.
Tod@s tenemos amig@s de derechas y de izquierdas, e incluso, aquell@s otros que no se pronuncian sobre ninguna bancada, como si la política fuese ajena para ellos. Tod@s, salvo excepciones, condenan con firmeza el exterminio nazi de millones de personas durante la II Guerra Mundial. Alguno, más vehemente que los demás, condena también las atrocidades cometidas por el comunismo (¡y el capitalismo y los mercados!). Incluso, el Presidente del PP en Andalucía, Javier Arenas, cuando ETA anunció el pasado 20 de octubre de 2011 el fin de la violencia les pidió "especialmente a los jóvenes, que las lágrimas (sobre los muertos, se refería) las convirtieran en memoria". A tod@s, sin excepción, les damos la razón, y el genocidio nazi hay que condenarlo, explicarlo en las aulas, educar en libertad y tolerancia; y más aún, hay que evitar por todos los medios a nuestros alcance, que una tragedia humana de esa magnitud vuelva a repetirse. Nuestras lágrimas deben convertirse en memoria, como diría Arenas; y el genocidio, la privación de una sola vida, es motivo suficiente para alzarse con las armas que la razón nos proporciona.
El dilema, por localismo, por el trasunto de cierta sociología franquista en nuestro orden social y político, viene cuando unos creemos fundadamente que lo que pasó en España durante la guerra y la posguerra de Franco fue la antesala del genocidio nazi practicado en Europa; y otros, más impetuosos, sin duda, opinan que son dos cosas distintas las ocurridas, y que para nada se puede hablar de crímenes de lesa humanidad. ¿Cómo llamamos, entonces, nos preguntamos, las miles de víctimas inocentes provocadas por el fascismo español, el intervencionismo extranjero y la complicidad de la iglesia católica?. ¿Cómo podemos explicar a nuestros hijos (en las aulas también) que en España no hubo una guerra civil, sino una agresión militar primero, y fascista después, cuando Alemania, Italia y Portugal apoyaron con armamento y miles de hombres a los golpistas?. Acaso alguien piensa hoy en día, que si Mola y Franco no hubiesen tenido el apoyo de las potencias fascistas hubiesen ganado la guerra. La guerra de España, fue una guerra de agresión, una invasión en toda regla de tropas mercenarias africanas (esclavizadas por una potencia colonialista, dicho sea de paso), italianas y alemanas; y para nada, en sus orígenes, fue una guerra civil. El pueblo no fue el que salió a la calle a asesinar a sus hermanos. Todo lo contrario, fue una parte del ejército, el más reaccionario, quien enfrentó a unos contra otros y convirtió, por interés, la guerra en civil, adjetivo con el que justificaron sus crímenes.
Los golpistas tenían claro su objetivo: "Es necesario crear una atmósfera de terror, hay que dejar sensación de
dominio eliminando sin escrúpulos ni vacilación a todo el que no piense
como nosotros. Tenemos que causar una gran impresión, todo aquel que sea
abierta o secretamente defensor del Frente Popular debe ser fusilado", diría Mola en mayo de 1936, ante los preparativos de la rebelión militar. Y el terror y los asesinatos se sucedieron sin interrupción en aquellos territorios que quedaron bajo las huestes fascistas; al igual que el resto del territorio nacional después de la guerra. Con el final de la guerra efectivamente no llegó la paz, sino la victoria, pero la violencia continuó sine die, traspasando incluso las propias fronteras patrias, en ese intento de crear una Unión Europea de corte fascista con sede en Berlín, que hiciera realidad los sueños imperiales y raciales de un puñado de megalómanos, donde Franco era una pieza más del engranaje nazi.
Entrevista Hitler-Franco antes del retoque fotográfico |
Fascistas españoles de la Divisón Azul |
Soldados republicanos en un campo francés. Fuente: todos los rostros.
Efectivamente, a la ola de violencia militarizada sobre el rojerío (y derecha republicana de paso) que había quedado en España, los golpistas no cejaron en su empeño de perseguir a los refugiados y exiliados españoles más allá de nuestras fronteras. El Presidente Manuel Azaña sería el caso más conocido, pero fueron más de 300.000 republicanos los que abandonaron sus hogares por miedo a la represión franquista, pasando a Francia o al norte de África. El camino no fue de rosas precisamente, y las autoridades galas los metieron en masa en campos de concentración, que no de internamiento, como la historiografía nos cuenta. Trístemente famosos se harían los campos de concentración de Argelés-Sur Mer; St. Cyprien; Le Vernet; Colliuore; Rivaseltes; Septfonds, Brens, ... y un largo etc. Por esos campos rodeados de espino y custodiados por soldados senegaleses que les recordaban a los regulares marroquíes, pasaron varias docenas de soldados y exiliados porcunenses. Francisco González Moreno, del PCE; Eusebio Luque Cobo, de IR; Manuel Camuña Pérez, del PCE; Antonio Barranco López, del PCE; Demetrio Bellido Píñar, de las JJ.SS.UU; Francisco Caballero Ruano; Juan José Collado López, del PSOE; Francisco González Delgado, del PCE; Sebastián Moreno Ortega; Manuel Requena Pérez; Modesto Ruiz de Quero; Luis Ruiz Jaén, del PSOE; Rafael Ruiz Requena; Daniel Torres López; Pascasio Campo Sánchez, mutiliado; Antonio Toribio Arjonilla, del PCE; y otros muchos más a los que habría que unir a los fallecidos en los campos de exterminio nazis, y a aquellos "ilusos" que creyeron en la benevolencia del caudillo y volvieron a España para ser encerrados en campos, cárceles, o simplemente excluidos de la nueva (vieja) sociedad.
Jerarcas nazis en Mauthausen |
Triángulo azul de los apátridas |
Españoles recién liberados de Mauthausen. Foto de Francisco Boix.
Pues bien, la mayoría de los españoles terminarían en el infierno concentracionario de Mauthausen, un complejo que incluía hasta 40 establecimientos y kommandos de trabajo distribuidos por buena parte del territorio austríaco unido a Alemania desde 1938. Allí perecieron cerca de 200.000 personas, entre ellos cinco mil españoles, de los cerca de 8.000 que pasaron por él. ¡Franco supo desde el primer momento el destino final de los republicanos!. ¡Nada hizo por interceder por ellos!.
Presos en Mauthausen. Foto de Francisco Boix, fotógrafo y deportado |
Francia, pese al maltrato inicial que les dispensó a los españoles, ha sabido recordar la ayuda prestada de miles de "apátridas" en su lucha antifascista. Alemania ha pasado página y ha pedido perdón por los crímenes cometidos durante el nazismo; al igual que lo ha hecho Japón en el otro polo; e incluso el peculiar líder ruso V. Putin, sobre el genocidio comunista. ¿Para cuándo una disculpa del estado español sobre los crímenes cometidos por el franquismo?. Y la Iglesia, ¿pedirá perdón alguna vez?.
Relación nominal de porcunenses en los campos de exterminio nazis.
AGUILERA MORENO, Rafael | Porcuna | Liberado | 05/05/1945 |
GARRIDO BELLIDO, Benito | Porcuna | Liberado | 05/05/1945 |
GONZÁLEZ QUERO, Antonio | Porcuna | Fallecido | 06/11/1941 |
PELÁEZ TORRES, Antonio | Porcuna | 25/07/1944 | |
QUESADA OLMOS, Manuel | Porcuna | Fallecido | 18/09/1941 |
SERRANO VILLA, Luis | Porcuna | Fallecido | 08/01/1945 |
TORRES GUTIÉRREZ, Pablo | Porcuna | Fallecido | 05/02/1942 |
FUENTES:
- Emilio Mola, Navarra 1936, De la esperanza al terror.
- El País. Carta abierta al Sr. Serrano Suñer (1 de julio de 1979).
- Buscador de españoles deportados a campos de concentración. Portal de Archivos Españoles. Ministerio de Educación, Cultura y Deportes (consulta on line el 7.05.12).
- Imagen de "Los fascistas españoles de la División Azul". La Aventura de la Historia.
- Imagen de la entrevista Franco-Hitler trucada. La Vanguardia.
- Imágenes de Francisco Boix. Amical de Mauthausen.
- Imagen de SS ajusticiado en Gusen. Center for Holocaust & Genocide Studies.
Apartado de correos nº 47-23790. Porcuna (Jaén)
nombresporcuna@gmail.com
Rogamos la máxima difusión entre vuestros contactos
ENHORABUENA POR ESTA ENTRADA Y POR DEFENDER LA MEMORIA DE LOS OLVIDADOS... SU LABOR ES IMPRESCINDIBLE. MUCHAS GRACIAS.
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