MANUEL RAMOS PINO Y LOS PRESOS DERECHISTAS QUE PASARON POR EL ARRESTO MUNICIPAL DE PORCUNA (JAÉN). 1936.
Archivo Militar de Sevilla
Uno no deja de sorprenderse cuánta información puede proporcionarnos un archivo arrumbado, polvoriento y casi destrozado, como es el Archivo Militar Segundo de Sevilla. Hace algún tiempo ya, accedimos al Expediente del Juicio Sumarísimo y de Urgencia contra Manuel Ramos Pino, a la sazón, secretario de Izquierda Republicana y concejal del Frente Popular de Porcuna durante los meses de febrero a agosto de 1936. Sin querer entrar por ahora en la vida y obra de este personaje peculiar, tenemos que decir que su expediente es uno de los más “ricos” y “jugosos”, en cuanto a información se refiere, de los que hemos desenpolvado hasta ahora.
Por tónica general, los expedientes de los represaliados del franquismo suelen ser parcos en detalles, generalistas en sus acusaciones y faltos de cualquier defensa. Bastan un par de párrafos del Jefe de Falange, el cura párroco, el alcalde o el sargento de la guardia civil, para dar con los huesos en la cárcel o en las tapias del cementerio. En cuanto a los acusadores, en honor a la verdad, y al pueblo de Porcuna, hay que decir que no fueron más de veinte las personas que se prestaron a este juego, lo que dice mucho de unas gentes sometidas a una represión brutal, pero otro lado, conscientes de la dignidad humana de los acusados.
En el caso que traemos hoy a colación, es decir, el expediente de Manuel Ramos Pino, se nos escapa a esa tónica general de “falsas y calumniosas” acusaciones a las que se ven sometidos los vencidos, porque no olvidemos, ese fue su peor crimen, ser vencidos en los campos de batalla. Manuel Ramos Pino tuvo que ser una persona íntegra que no dejó indiferente a nadie. Él mismo se entregó a las autoridades vencedoras a finales de marzo de 1939 en Jaén; pues en principio nada tenía que temer.
Los informes que remiten las autoridades de Porcuna al tribunal militar de Jaén, incluidas las declaraciones de dos testigos, son, como casi siempre, una serie de adjetivoS y calificativos que intentan desacreditar al acusado: “Participó en los asesinatos de ...; incautó tierras, ganado, ...; registró casas, ...; formó a las milicias, ...; ... destacado dirigente marxista, ...; formó parte de las checas de la localidad, ...;” y así sucesivamente. Como decimos, todo esto fue firmado por el cura, el alcalde, el sargento de la guardia civil y el jefe de Falange, mas dos testigos, que en esas fechas no estaban ni en Porcuna. Hasta aquí podríamos decir que todo transcurría con normalidad marcial y justiciera; cuando de pronto, el Jefe de Policía y un camisa vieja de Falange, envían al tribunal sendas cartas u avales diciendo lo “bueno, trabajador, honrado, legal, ...” que era Manuel Ramos. Se produce aquí un punto de inflexión sin parangón. A partir de aquí, sin saber de quién parte la iniciativa, comienzan a llegar al tribunal militar, presidido como segundo por el Teniente José Escobedo, nuestro barbilampiño héroe de Rusia, dos decenas de misivas o avales a favor del exconcejal azañista. La gran mayoría de los avalistas, entre los que se encuentra el presbítero local Casto Martos Cabeza y el propio Jefe de Policía, Ricardo Recuerda Millán, “Rabito Mona”, habían sido detenidos en los días posteriores al golpe militar, e incluso antes, como es el caso de Ricardo Recuerda y su hermano José. Otros seis ex-cautivos, como le gusta decir a la jerga de entonces, también declaran a su favor.
En suma, la pregunta sería, ¿qué hizo Manuel Ramos Pino, para que todos estos derechistas suplicasen para que quedase en libertad?. Todos los declarantes coinciden, incluso aquellos que en primera instancia lo acusaron, en que fue un hombre trabajador, honesto, y, esto es lo más importante, intercedió por ellos cuando éstos se encontraban en la cárcel. Tal fue su intercesión, que la mayoría quedó libre, pudiéndose pasar al otro bando para “continuar la Cruzada”. Lo más curioso de todo es que quedaron libres el 22 de diciembre de 1936, días después de que se produjese la segunda saca de derechistas en Porcuna.
Esto nos lleva a otro pregunta: ¿las sacas de derechistas fueron organizadas por el Frente Popular o realmente fueron producto de los elementos milicianos descontrolados que esos momentos se encontraban en Porcuna?.
Todavía es difícil responder a esta pregunta, pero por las informaciones orales, los documentos y este en concreto de Manuel Ramos Pino, parece que el Frente Popular de Porcuna intentó en todo momento evitar el derramamiento de sangre. Este hecho vendría confirmado por el traslado inmediato de los presos a Jaén, que posteriormente pasarían a Alcalá de Henares para ser juzgados como desafectos a la República. Curioso es, que casi todos, volviese con vida de los campos de trabajo de la República.
Entre los expresos que declaran a favor de Ramos Pino se encuentran los siguientes (las edades corresponden a 1936):
- Salvador Torres del Pino, 41 años. Industrial. F.
- Joaquín Puentes Torres, 27 años. Albañil.
- Patricio Ureña Galán, 26 años. Camarero.
- Dimas Torres Jaén, 36 años. Maestro de molino.
- Francisco Torres Herrera, 35 años. Peluquero.
- Pablo Garrido Talavera, 33 años. Agente comercial. F.
- Antonio Heredia Torres, 23 años. Carpintero. Excombatiente.F.
Rogaríamos a los familiares de estas personas que nos aporten cualquier información al respecto sobre estos hechos.
Fuente: Archivo Militar Segundo de Sevilla. Folio 42, del Expediente Sumarísimo de Urgencia nº 43936 contra Manuel Ramos Pino. Legajo, 577, nº 19101.
¿podria ser que los elementos milicianos descontrolados sea un invento para quitarse las pulgas o purgar culpas y como consecuencia de este invento neohistoriador(memoria historica) llevar a lo mas alto de la gloria al tiisimo San rafael montilla? seguiremos atentos a esta burda.
ResponderEliminarComo estamos seguros que tienes pruebas irrefutables de la complicidad del alcalde y concejales de izquierda y republicanos en todos los desmanes cometidos en Porcuna, incluidos los asesinatos, te agradeceríamos que los compartieses con nosotros.
ResponderEliminarMientras tanto, nosotros, seguimos investigando y ampliando nuestro campo de conocimiento en los hechos.
Muchas gracias.
esta todo investigado y en su momento se quedo todo en su sitio ¿pero cual es el problema? es que el tiisimo estaba de mierda hasta las cejas y sigue estandolo porque por mucho que se investigue las personas mayores de este pueblo te lo pueden decir.
ResponderEliminarOs puedo dar un consejo lo mejor es que espereis una diez añitos que ya no quede nadie que pueda hablar del desaguisado que formo san rafael montilla y vosotros a lo vuestro a inventar de nuevo la historia.